Periodistas y reporteros gráficos recordaron ayer el extraordinario trabajo que desarrollaron el 3 de noviembre de 1995, cuando fue la voladura intencional de la Fábrica Militar de Río Tercero. La actividad fue organizada por la Municipalidad y el Círculo Sindical de la Prensa y la Comunicación de Córdoba (Cispren).

Por Fabián Menichetti y Miguel Apontes*

Ayer, en el Anfiteatro Municipal Luis Amaya de Río Tercero, periodistas, camarógrafos, reporteras y reporteros gráficos, todos trabajadores y trabajadoras que registraron lo sucedido el 3 de noviembre de 1995, fecha del atentado en la Fábrica Militar, recordaron la cobertura del funesto hecho.

El encuentro fue organizado por el Círculo Sindical de la Prensa y la Comunicación de Córdoba (Cispren) y la Municipalidad de Río Tercero y contó con la presencia de periodistas de distintos lugares. Hay quienes hicieron llegar videos relatando aquellos momentos. El encuentro, que tuvo puntos de alta emotividad, se extendió por más de dos horas.

El acto se inició con las palabras de la secretaria General del Cispren, María Ana Mandakovic; y Fernando Ceresole, secretario de Interior del gremio de prensa. Por parte del municipio, como anfitrión habló el intendente Marcos Ferrer y la directora de Educación, Carolina Goñi. 

Ferrer expresó: «Agradezco a ustedes, los y las periodistas, porque durante todo el proceso, de tantos años, la única forma que tuvimos los riotercerenses de refutar la injusticia de nombrar a este hecho como accidental fueron ustedes; que siempre pusieron en duda la hipótesis de un accidente. Permitieron que a lo largo del tiempo permaneciera vigente esta causa. Porque a la prensa nacional le costó mucho nombrar a los hechos como atentado. Desde Río Tercero, con una acción muy puntual, como fue no adherir al duelo por la muerte del expresidente Menem, logramos instalar a nivel nacional el tema del atentado y desentramar la venta ilegal de armas; ustedes lo reflejaron, lo investigaron y su trabajo permitió conocer el móvil del atentado».

La secretaria General del Círculo Sindical de la Prensa, sostuvo: «Recordar aquello que sucedió hace 26 años y que nosotros, como trabajadores y trabajadoras de prensa fuimos los encargados de mostrar a la sociedad ese momento tan traumático, es muy importante».  Mandakovic trajo a colación las palabras del expresidente Carlos Menen, ni bien arribó a esa ciudad:  «Ustedes tienen la obligación de informar que esto es un accidente’, decía Menem. Nosotros sabemos que no tenemos la obligación de informar lo que nos dicen otros, sino que nuestra obligación es registrar y buscar la verdad de los hechos, ésa es nuestra responsabilidad social como comunicadores. En honor al trabajo que hicimos las y los periodistas, los reporteros gráficos, los productores, en esta oportunidad nos parece fundamental rescatar semejante tarea».

El acto revalorizó la importancia de mantener viva la memoria. En este caso, a través del relato de quienes no sólo durante aquel 3 de noviembre realizaron la cobertura, sino también en los días, meses y años posteriores, que se continuó informando y llevando a la población los detalles de la causa. 

Recuerdos, emoción y memoria

En la jornada estuvieron representantes de la prensa de distintos puntos de la provincia, y, por cierto, de Río Tercero y  poblaciones de la región. Todos destacaron cómo la cobertura de aquél hecho fue un punto de inflexión en su trabajo, y también en sus vidas. Y es que no se trató únicamente de la labor profesional, sino de algo que caló profundamente en lo humano, por asistir a un escenario de guerra como es el que presentaba la ciudad aquella nefasta jornada.

Se recordó, además del hecho en sí, la conferencia de prensa que brindó en aquella tarde el entonces presidente, Carlos Menem -flanqueado por el entonces gobernador Ramón Mestre- cuando aseguró ante la prensa que se había tratado de un «lamentable accidente» y no de un atentado, conminando a las y los periodistas a reproducir lo que estaba señalando.

El encuentro de inició fue con un minuto de silencio en memoria de las siete víctimas fatales. El jefe comunal, hizo un paréntesis para rememorar la lucha de la querellante Ana Gritti, quien evitó que la causa judicial se cerrara como un accidente. «Es un acto de Justicia a su memoria», dijo.

Recuerdos de trabajadoras y trabajadores de prensa de distintos lugares de la provincia. De quienes vivían en Río Tercero, pero también de periodistas de la zona, como el caso de Almafuerte y Embalse, que llegaron no sólo a cubrir lo sucedido, sino que en dichas poblaciones, como en tantas otras de la región, se recibió a los riotercerenses evacuados en aquellas jornadas. 

Imagenes guardadas para siempre

En el caso de quienes desarrollaban sus tareas en otras poblaciones de la provincia y en la misma ciudad de Córdoba, se indicó, que más allá del trabajo profesional, lo ocurrido en Río Tercero fue un antes y un después, un punto de inflexión, no solamente en su trabajo de comunicar, sino también en sus vidas.

Se vivieron en algunos pasajes momentos de emoción, al rememorar aquellas jornadas en donde la ciudad se había convertido en un campo minado de proyectiles y esquirlas con una población que había sido víctima de un brutal atentado. El mismo se llevó la vida de siete personas, provocó heridas en más de 300, ocasionando cuantiosos daños materiales y un impacto emocional que perdura hasta el presente.

Se reivindicó la necesidad de una reparación histórica para Río Tercero por parte del Estado, con el pedido que se viene realizando de una Universidad Nacional Pública, para remediar hacia el futuro, aunque más no sea en algo, lo que se le provocó en el pasado a la comunidad. Se destacó que la memoria debe perdurar, precisamente para que un hecho atroz como el sucedido nunca vuelva a ocurrir

Se dejó en claro, que con el transcurrir de los años, se dedujo que se había intentado, con la teoría del accidente, convertir a la Fábrica Militar en la victimaria, sosteniendo tanto desde el poder político y la Justicia de entonces, que habían sido los propios trabajadores quienes habían provocado el desastre, cuando tanto la fábrica, como los mismos empleados, habían sido víctimas de un atentado, al igual que toda la sociedad. Aquello había sucedió en un contexto de un achicamiento de la industria estatal, de desguace planificado de la industria.

Oficiaron como moderadores los periodistas Fabián Menichetti y Néstor Pérez. Menichetti, oriundo de la ciudad, editor del portal Tercer Río Noticias y autor del libro «Esquirlas de Noviembre», a propósito de la adhesión de tantos y tantas periodistas de la zona al acto, lanzó la propuesta que ya viene conversando con distintos colegas. «Considero necesario que tengamos para nuestra región una delegación del Cispren, de manera de organizarnos los y las periodistas de la zona y así colectivamente poder plantear nuestras demandas, defender nuestros derechos», indicó.

A su turno, Néstor Pérez celebró lo que consideró una síntesis de tantas intervenciones: «Lo que primaba en esos momentos entre nosotros, los y las periodistas, era la solidaridad, el espíritu colaborativo. Y eso merece destacarse, sobre todo para trasladarlo a las nuevas generaciones de profesionales».

El encuentro, que se realizó en el Anfiteatro Municipal Luis Amaya, pudo ser seguido, además, por las plataformas virtuales del municipio, que conjuntamente con el Cispren, difundieron lo realizado el martes. Para la concreción de la actividad, fue fundamental el trabajo de la Secretaría de Interior del Cispren. Su titular, Fernando Ceresole, estuvo al frente de la coordinación general del acto y las invitaciones a los trabajadores y trabajadoras de prensa que en 1995 cubrieron el criminal atentado a la Fábrica Militar Río Tercero.

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