El pasado viernes y sábado se llevó a cabo el 40º Congreso Provincial del Cíorculo Sindical de la Prensa y la Comunicación de Córdoba (CISPREN). Durante el Congreso se analizó la situación del país y del colectivo de prensa. A la vez que se anunció la adhesión al paro nacional de la CTA-A que se realizará el 16 de junio, en reclamo de un aumento de emergencia, contra el ajuste sistemático del gobierno y la injerencia del FMI. EL plenario de cierre definió que la delegación de Cruz del Eje será sede del próximo congreso.
Por Katy García y Myriam Mohaded*
En el Galpón Blanco del Centro Cultural Andino, en la ciudad de Río Cuarto, sesionó el 40° Congreso de Trabajadores y Trabajadoras de Prensa de Córdoba, con la consigna “De aquella unidad gremial a la organización política de los trabajadores”. El Congreso definió honrar la memoria de Francisco “Pancho” Colombo, ex secretario general del Cispren y primer director periodístico de la revista Umbrales, y de Luis Fabián Menichetti, delegado de Río Tercero.
Además del álgido debate, en el lugar se montaron dos muestras: Una de Jericjes /Magalú y la del Centro de Documentación del Cispren, con actas históricas y fotos que rescatan la memoria de la institución gremial.
En el acto de apertura, el secretario general de la seccional de Río Cuarto, Javier Lucero, dio inicio a la jornada junto a María Ana Mandakovic, secretaria General del Cispren y Carla Gaudensi, secretaria General de la Fatpren.
Lucero, saludó la presencia de los 120 congresales presentes. Especialmente a las y los trabajadores de prensa que llegaron desde diferentes lugares de la provincia. También dio la bienvenida a las organizaciones sindicales con quienes comparten luchas codo a codo “en manifestaciones y paros donde hemos sentido la compañía par a par en estos tiempos difíciles. A los estudiantes y profesores del departamento de Comunicación de la UNRC, que comprenden la necesidad de estos intercambios fluidos entre trabajadores y estudiantes”, y comparten proyectos y trabajos. “Este no es un Congreso más, no solo por el número sino por el momento en que nos encuentra, un momento de luchas y necesidades”, afirmó. Recordó los antecedentes históricos, sus comienzos en 1984 y saludó a Juan Carlos Giuliani, uno de los precursores de aquella jornada. “En aquel momento las premisas eran la libertad de expresión y los derechos humanos. Hoy nos encontramos en otras luchas parecidas, y más urgentes, que debatiremos ahora”, agregó.
En representación de la Fatpren, la secretaria General, Carla Gaudensi, manifestó: “para nosotros y nosotras es un orgullo poder estar acá, junto a una organización compañera de la cual hemos tomado gran parte de la experiencia y el desarrollo que llevaron adelante como sindicato. Lo digo como militante, como trabajadora, como dirigenta del SiPreBA, y ahora en esta instancia, organizados nacionalmente, para luchar por salarios y seguir construyendo la Federación”, señaló. Contó que esta experiencia de realizar Congresos provinviales fue tomada por el Sindicato de Corrientes que realizará su primer Congreso la semana próxima. También se refirió al avance del pluriempleo y la precarización laboral y celebró la reglamentación de la ley de equidad de género.
De la unidad gremial a la organización
A su turno, la secretaria General del Cispren, María Ana Mandakovic leyó el documento de apertura del congreso. Se refirió al hecho histórico, para el gremio de prensa, de realizar nuevamente el encuentro en la misma ciudad en donde nació hace 39 años: “Nos pareció importante que Río Cuarto sea la sede para reflexionar de manera colectiva cómo se transitó desde aquella unidad gremial a la organización política de les trabajadores”, expresó.
En un raconto de lo sucedido en los años de recuperación democrática, Mandakovic, destacó el valor que tuvo para los sindicatos, como organizaciones populares, salir de la oscura noche de la dictadura y afirmó que la recuperación de la democracia fue posible por la lucha de un conjunto de organizaciones que le puso fin al sistema de muerte y saqueo. También rememoró la lucha de los 30 mil compañeras y compañeros asesinados y desaparecidos, donde seis de cada diez eran de extracción sindical, “porque el plan era desarticular al movimiento obrero organizado y aniquilar la industria nacional”, expresó.
En este sentido, destacó la lucha de las Madres de Plaza de Mayo, “que nunca claudicaron en sus reclamos”, y la marcha del movimiento obrero bajo la consigna “Paz, Pan y Trabajo” que se realizó el 30 de marzo de 1982, “que “funcionó como un tiro de gracia para poner fin a la más sangrienta dictadura que se recuerde en Argentina”.
De esos primeros años de vida democrática, Mandakovic dio cuenta de las prioridades que existían para la clase trabajadora como la condena a las atrocidades de la dictadura, las libertades recuperadas, el derecho a la libre asociación y la libertad de expresión. “Somos conscientes que la dictadura cívico-militar buscó combatir con una represión ilegal y feroz a quienes plantearon un proyecto emancipador, y logró instalar la más nefasta restauración liberal conservadora, inclinando la balanza hacia un proyecto de país de minorías”.
Puja distributiva
En cuanto a los derechos y conquistas del sistema democrático que aún no se recuperaron, “nos atrevemos a preguntar, si la democracia en los términos que la concebimos no será quizás una utopía en sí misma. ¿Es entonces la democracia una utopía institucionalizada?”, reflexionó la dirigenta.
En este sentido, destacó el valor del sistema democrático en tanto implica una lucha permanente por consolidar transformaciones hacia un país con equidad en la distribución de la riqueza y justicia social; que busque políticas que frenen los avances de los sectores reaccionarios y salga del papel que se le asignó el Consenso de Washington (1989) a Argentina y a la región “donde las peores consecuencias caen sobre nuestro pueblo”.
Al respecto, afirmó que la recuperación del Estado de derecho debe garantizar un sistema de leyes, instituciones y normas que instauren los derechos conquistados y los que aún no están consagrados, “sigue existiendo un Poder Judicial que no rinde cuentas a nadie; un cuerpo antidemocrático que mientras mantiene privilegios, se arroga la intervención permanente sobre decisiones políticas, fallando casi siempre en defensa de los poderes concentrados. Una verdadera corporación que, en este sistema patriarcal, reproduce una y otra vez inequidades”.
Los golpes de mercado son el nuevo método de irrupción en la discusión política en el avance sobre nuestros derechos, aseguró en su alocución, tanto como las mismas tensiones de intereses entre el capital y el trabajo que marcaron a fuego el siglo XX y se sostienen. Por eso, el próximo 16 de junio el Cispren adhiere al paro nacional y jornada de protesta de la CTA-Autónoma junto a otras organizaciones sindicales y sociales, en reclamo de un aumento de emergencia, denunciar el ajuste sistemático del gobierno y la injerencia del FMI: “La resistencia, desde un espacio nacional y popular está en la calle. Ese es nuestro lugar natural como clase trabajadora”. “Los trabajadores y las trabajadoras en su conjunto tenemos la obligación de denunciar que no hay democracia posible con el hambre de nuestro pueblo”.
Nadie se salva solo
“El acuerdo con el Fondo es inflacionario”, sostuvo Mandakovic. Y en este sentido, planteó que “de nada sirve que nos esmeremos en discutir paritarias si lo poco o mucho que se gana se licúa con el chango del supermercado”. A esto lo relacionó con la ardua paritaria que llevó adelante el Cispren que contempló la cifra récord de 21 audiencias en el Ministerio de Trabajo, numerosas asambleas en los medios y dos paros históricos en el mes de abril. Una lucha que se dio junto a la Fatpren: “logramos firmar un primer acuerdo salarial para este año con una recomposición de un 36% para el cuatrimestre abril – julio que comprende a todas nuestras escalas, más un bono compensatorio de $40 mil para capital y $30 mil para Río Cuarto e interior A”, precisó. Cabe mencionar que el acuerdo con Interior B está próximo a ser firmado.
Un acuerdo que además comprende un eje clave que fue lograr que las empresas contemplen una cláusula de garantía, que se activará el 1° de agosto, para que los salarios de prensa no pierdan contra la inflación.
En este tramo del discurso destacó el carácter colectivo de las acciones, porque “nadie se salva solo y lo que les sucede a las y los trabajadores de prensa de Córdoba, también les pasa a los del país”. Destacó la ratificación de la personería gremial del Sipreba como un paso importante en la lucha y defensa de trabajadores y trabajadoras de prensa y la libertad sindical.
En otro orden, comentó que el festejo del Día del Periodista se realizó en la ciudad de Cruz del Eje con motivo de los 100 años del periódico “La Idea”, único medio gráfico editado con linotipos de plomo móviles.
De aquella época a la actualidad
En otro trayecto del discurso expresó la preocupación del colectivo por la cada vez mayor concentración de medios, las nuevas tecnologías y el avance de la inteligencia artificial que amenaza a los trabajadores de prensa en términos salariales, laborales y profesionales. Estos cambios generados por las nuevas tecnologías que “no son neutrales” han diezmado las redacciones a través del teletrabajo que se instaló con la pandemia.
En ese orden, subraya que, para poder trabajar actualmente, además de saber redactar se fueron sumando el registro de fotos, videos, filmar, editar, diseñar, conducir en radio y/o TV, realizar vivos, streamings y actualizar las webs: “todo por el mismo salario”, como lo predijo Jericles en su emblemática viñeta para el Primer Congreso. Y que actualizó en la figura de una trabajadora que además de precarizada, carga con las tareas del hogar y de cuidado. Y como si esto fuera poco “seguimos siendo ninguneadas con salarios un 30 por ciento por debajo y sufriendo situaciones de violencia y discriminación”. En esa dirección sostuvo que no se trata “de un signo de época” sino de la disputa entre el capital y el trabajo que “hoy se manifiesta en un escenario sofisticado de capitalismo de plataforma que cierra con salarios bajos, con empleo no registrado y con la ausencia del Estado como organismo de control”. Es clave entonces que haya “Ministerios de Trabajo fortalecidos para dar la pelea” y que intervenga el Estado en la regulación de las grandes apps.
La dirigenta aclaró que no es “sólo un problema de las mujeres y las disidencias” sino que es parte de la lucha gremial que aspira a que haya equidad de género. En ese sentido, celebró la reciente reglamentación de la ley de Equidad de Género en los medios de comunicación. Un desafío de un “nuevo paradigma comunicacional” que tendrá que ir acompañado del compromiso de las compañeras “organizadas y dispuestas a ser elegidas delegadas en los lugares de trabajo y participar activamente en la vida política-gremial de nuestras organizaciones”.
En relación a los 40 años de democracia sostuvo que no hay duda que “aprendimos a resistir” como trabajadores en los medios hegemónicos y tradicionales como las y los compañeros de la autogestión que siguen luchando por “la imprescindible distribución equitativa de la pauta oficial, que constituye esa otra paritaria, casi invisible, que hay que seguir disputando”. Experiencias comunicacionales “imprescindibles” para “perforar la agenda pública, contrarrestar las falsas noticias y llevar la mejor información a la sociedad”.
“¿Cuál es el papel de las y los comunicadores y trabajadores de prensa en una sociedad en donde más del 40% de la población está bajo la línea de la pobreza; donde el 54% de ese universo corresponde a infancias y juventudes; donde el 49% de la población laboral está en situación de informalidad, sin derechos y con ingresos por debajo del mínimo vital y móvil?”. Esta pregunta planteada obró como disparador en el intenso y rico debate intergeneracional posterior.
Más adelante, se anunció la nueva edición de la Revista Umbrales, una herramienta de debate político imprescindible realizada por más de 30 compañeras y compañeros. También recordó cómo los sectores poderosos impidieron la aplicación de la LSCA mediante cautelares y luego Mauricio Macri por decreto derogó el punto principal que impedía el monopolio. Una decisión “a medida de las grandes empresas periodísticas y de los medios concentrados”. Ante esa situación, el actual Gobierno no recuperó lo perdido y tampoco la dirigencia política planteó cómo “garantizar el derecho humano a la información” y mucho menos “construir soberanía comunicacional”. Entonces, afirmó que es prioritario discutir una nueva Ley de Medios que incorpore “las nuevas formas que impuso la tecnología en el ejercicio de nuestro oficio”, teniendo en cuenta el papel de las y los trabajadores autogestionados para alcanzar la tan anhelada pluralidad de voces.
Poder popular
De cara al futuro la secretaria General manifestó que para que haya una democracia plena y justa es necesario que participen todos los sectores para avanzar hacia “un mundo más justo y equitativo”. En ese camino, convocó a no delegar en otros las responsabilidades y construir, desde una identidad de clase, poder popular.
El Cispren reafirma que “la salida de la crisis es colectiva, se trata de organizarnos, juntarnos para sumar fuerzas y generar nuevas ideas” para defender lo conquistado y repensar estrategias que “rompan con la disgregación que le cierra a este modelo de acumulación de riqueza”. A la vez, contribuir brindando “información veraz sin blindaje mediático con pauta pública o privada” para que el pueblo pueda tomar mejores decisiones.
Finalmente se refirió al periodismo como “el oficio más bello del mundo, aunque hoy bastardeado por los dueños de la industria cultural y las grandes plataformas”. No obstante reafirmó que sin duda es “uno de los garantes del sistema democrático”.
Desde esa mirada ratificó que “sin periodistas no hay periodismo. Y sin periodismo, la democracia se debilita, porque pierden las mayorías”. Cerró con estas palabras de Evita: “No hay nada más fuerte que un pueblo. Lo único que se necesita es decidir ser libre, justo y soberano”. Y ahí nomás invitó a debatir reunidos en una enorme rueda.
Durante la jornada del sábado, se realizó el plenario previsto para debatir el documento que finalmente se discutió, modificó y aprobó [Ver Despacho del 40 Congreso Final ]
Al finalizar la jornada de debate, se realizaron charlas temáticas simultáneas que abordaron “La crisis mundial del capitalismo”, por Carlos Rang; “Ganamos igualdad de derechos pero persisten las desigualdades”, en una mesa integrada por Marita Pedernera, Rosana Calneggia y Consuelo Cabral, y “El mundo laboral complejo, ocupación, cooperación y autogestión”, por Leonardo Brochero y Nacho Tellería.
La prolífica jornada culminó con la presentación de la revista Umbrales – Crónicas de la utopía, en un panel integrado por María Ana Mandakovic, Daniel Díaz Romero (secretario Cultura Cispren) y Beatriz Molinari, a cargo de la dirección editorial de la publicación.
Participaciones y adhesiones al Congreso
Fueron parte de las actividades los secretarios generales de mandato cumplido, Juan Carlos Giuliani, Guido Dreizik y Carlos Valduvino; autoridades y representantes de diversas organizaciones hermanas, entre ellas: Carla Gaudensi (Fatpren), José Manuel Cal Mora (Sipreba – TV Pública) y Ayelén Cesare (Sipreba- TV Pública); Miguel Rojo (ex secretario general Cispren); Luis Bazán, secretario general de Sivialco (Sindicato Vialidad Provincial); Ilda Bustos, secretaria General de la Unión Obrera Gráfica (UOG), José Luis Oberto (Sindicato de Comercio); Rafaela Alcoba (ATE- CTA-A Río Cuarto), Jorgelina Fernández ( Sindicato de Empleados Municipales Río Cuarto); María Flores ( Ciencias de la Comunicación de Río Cuarto), Pablo Sorsolo (AAtrac); Rodolfo Barrio (Satsaid), Alejandro Larrietra (AGD); Diego Ceriani de la Federación de Cooperativas de Trabajo.
La conducción del acto estuvo a cargo del periodista Marcelo Ortiz quien leyó además numerosas adhesiones, entre ellas, la de Leticia Medina (sec General de la CTA de los Trabajadores y secretaria adjunta de Adiuc), Luis Zanetti (director de Radio Nacional Córdoba), Matias Dreizik del Instituto de Salud Laboral y Medio Abiente (Islyma), Miguel Arias, del Sindicato de Peones de Taxi (Sipetaco); Darío Fuentes, Presidente del Consejo Deliberante de Rio Cuarto; Lucas Bruno (Movimiento Evita), Cooperativa Cuchá, Maria Eugenia Romero de la Confederación Argentina de Trabajadores del Espectáculo Público (CATE), Maria Eugenia Romero ( Utedyc),; Gabriela Estevez (FdT), los candidatos a legisladores Glenda Henze (Creo en Córdoba); el candidato a concejal de Córdoba Agustín Arzamendia (Córdoba de Todos), y la Asociación Amigos del periódico La Idea (Cruz del Eje).
*Periodistas. Foto principal Leo Luna. Interior Leo Luna, equipo de La Poderosa y Prensa Cispren.
Nota: www.cispren.org.ar y www.prensared.org.ar